68 | La ‘no censura’ de Instagram
En Mutante abordaron el tema de las criptomonedas desde el periodismo y al medir el impacto y la distribución de los contenidos se encontraron con varias sorpresas y algunas lecciones. Nos contaron.
Por Sara Castillejo Ditta, gestora de inteligencia digital de Mutante.
Ser periodista de datos y estar a cargo de la medición de impacto y la distribución de contenido de un medio digital se siente como investigar el poder: a medida que aprendes cómo funciona, te crecen las ganas de quemarlo todo.
Quizás, como periodistas, recuerden a esa persona (no siempre amable) que les pedía notas de tendencia para satisfacer el ‘SEO’. Algunos habrán lidiado con el cambio del título en la web de su historia mejor reporteada “para que tenga más punch”. Esto es lo que he aprendido de la distribución de contenido hasta hoy: no hay tiempo para buscar maneras de que la audiencia valore tu gran especial, tienes que hacer algo que sea fácil de consumir para que el algoritmo se encargue solito.
Pero fácil quizá sea la palabra menos usada en los consejos de redacción de Mutante. Tal vez últimamente usamos más criptomoneda.
En agosto, Mutante se propuso conversar sobre la relación entre los activos digitales y los derechos humanos. Beatriz Valdés, la periodista encargada de abordar el tema, se puso en modo nerd (más); Will Huertas, gestor visual, se sumergió en el cyberpunk para desarrollar la identidad visual de las piezas y Alexa Delprado, creativa digital, corrió a plantear una estrategia para aterrizar un tema de nicho a nuestra audiencia general. El resto del equipo hizo lo propio, su mayor esfuerzo. Fue difícil y divertido. Lo dimos todo pero ya sabes cómo termina esta historia.
Desde la primera publicación vimos el desinterés de la audiencia. Sin embargo, el equipo estaba tan comprometido que comentaron el post (cosa que nos es común) tratando de que el algoritmo le diera más visibilidad. En la segunda pieza pusimos de presente a algunos de los líderes políticos más reconocidos en América Latina contando sus coqueteos con las criptos. Intentamos conversar con una pregunta diferente y resultados menos positivos. Resolvimos algunas de las pocas dudas que no llegaron en posteos anteriores. La cosa seguía sin despegar y lo hablamos: ¿será que el algoritmo identifica el tema y no lo recomienda por alguna regla? Quitamos el tag #HablemosDeCriptomonedas de las imágenes y copies, si necesitábamos usar la palabra la escribíamos enrevesada. Hicimos un video en la calle para ver si levantaba el alcance; colaboramos con las colegas de Economía para la Pipol (cambiando un poco la estética) para ver si nos ayudaban a darle autoridad al tema. Nada.
No nos quedamos esperando a que el algoritmo hiciera todo el trabajo. Enviamos una newsletter, usamos stories con memes y video, redistribuimos los contenidos en WhatsApp, Facebook y X, cambiamos copies, usamos otros tags, pautamos, plantamos links en perfiles que hablan del tema en español.
La presión numérica puede producir una enorme angustia en una sala de redacción. A pesar de que procuramos desarrollar nuestro impacto más allá de las métricas tradicionales, el equipo veía los números en el feed y buscaban una explicación: “shadowban”, “el algoritmo nos castigó”.
Y la verdad es que no hay evidencia para pensar que nos penalizó.
En otras ocasiones, Instagram nos ha informado que un contenido político infringe una ‘norma de comunidad’, también ha puesto un aviso de ‘contenido sensible’ sobre algunas de nuestras piezas porque, por ejemplo, confunde el bastón de mando del pueblo nasa con un arma.
En esta oportunidad no hubo alerta, pero solo un post superó nuestro estándar de las 10 mil cuentas alcanzadas (y no fue el video). Además, la mayoría de personas que vieron nuestras publicaciones, eran ya seguidoras de nuestra marca, lo que sugiere que no las recomendó en el feed de personas nuevas.
Alexa, la creativa, concluyó que el feed quizás no es la mejor forma de hablar de criptomonedas: la gente llega al tema más veces a través de la búsqueda directa, dijo. Y habló también de posibles limitaciones en el algoritmo. Y es aquí donde recuerdo los fundamentos de la minería de datos y machine learning, vienen a mí las clases de data science y los libros sobre tecnología en mi estantería.
Veo claramente que, después de todo este esfuerzo, aún es posible que la conversación no haya despegado simplemente porque las primeras personas que vieron los post no interactuaron con ellos y esa omisión puso los contenidos más lejos de otros perfiles similares a ellos. No hubo contagio, no encontramos rápidamente un interlocutor para estos contenidos y eso bajó las probabilidades de que más gente interactuara con ellos, por lo que el algoritmo prefirió mostrarles otra cosa con mayor probabilidad de gustarles. Estadística inferencial. Punto.
Es una respuesta que podría parecer simple pero alberga mucha complejidad y, sobre todo, impotencia. No es cierto que puedas hablar de cualquier cosa en este ecosistema: hay un poder en interactuar que ya todos conocemos, pero hay otro que está implícito en el gesto de ignorar algo frente a nuestra pantalla. No es censura, no es una regla para penalizar un tema, pero sin duda ese gesto decide qué objetos culturales llegan más rápido al cementerio de internet.
Darle este tipo de feedback a una redacción creativa, esforzada y curiosa es lo que alimenta mi deseo interno de quemarlo todo. Sería más fácil decirles que el algoritmo nos censuró y no que un porcentaje importante de la gente que vió primero los post simplemente los ignoró. Me genera preguntas sobre la disposición que tenemos como usuarios en redes sociales y la cantidad de trabajo que los medios les invertimos de gratis a las plataformas. Pienso con envidia en los periodistas del siglo XX poniendo sus temas en portada y con eso en la agenda local o nacional. Suertudos.
Pero no te confundas, quiero quemarlo todo para volverlo a intentar. Al final yo también tengo este gen Mutante y si fuera fácil no le vería la gracia. Además, si lo piensas bien, hay tantas cosas que podríamos ignorar colectivamente en Internet si fuéramos conscientes de esa decisión ¡what a dream!.
Activa el modo 🌿 COP-16 🌿
Desde hoy hasta el 1 de noviembre se realizará en Cali la Conferencia de las Partes del Convenio sobre la Diversidad Biológica (COP-16). Suena muy técnico y destinado a gobiernos, académicos y expertos, pero debería interesarnos un poquito a todxs porque estamos sintiendo cada día los efectos de los cambios del clima y del ambiente, y la vida como la conocemos hasta ahora seguirá transformándose. Entre el pesismismo y la preocupación, estar informadxs de lo que pasa, interesarnos por las decisiones y compromisos de nuestros gobiernos y encontrar mejores formas de relacionarnos con el medio ambiente (ya sea el presidente de un país, el campesino o un ciudadano) es clave.
Como Liga tenemos el mejor aliado posible para estar al día de lo que pasará en la COP-16: el medio especializado Mongabay Latam, con quienes nos juntamos para compartirles lo más destacado del evento y llevar a la audiencias explicaciones que no siempre son fáciles. Tendrán un equipo de seis periodistas para cubrir la conferencia. También compartiremos las publicaciones de los aliados de La Liga que estarán de cobertura en Cali. Así que pendientes de nuestras redes sociales: @liganosilencio.
Por ahora, les dejo contenidos para empezar a ponerse en modo COP-16. Primero este video para entender qué es la COP de la biodiversidad.
Y, además, estos artículos:
➡️ Este de aquí para tener idea de los temas clave que se discutirán en la COP 16 de Biodiversidad en Cali
➡️ Este de acá para conocer más sobre la flor eterna de Inírida, la imagen oficial de la COP16 de Biodiversidad en Colombia
➡️ Y este para entender mejor el manejo de especies invasoras —como los hipopótamos en Colombia o la liebre europea en Perú— y cómo sigue siendo un reto en la lucha contra la crisis de biodiversidad. Se espera que este sea uno de los temas en la COP-16 para lograr que los países reduzcan para 2030, en un 50 %, las invasiones biológicas.
Y un bonus track
Antes de la Operación Perseo que el gobierno implementa desde la semana en El Plateado, corregimiento de Argelia, Cauca, nos juntamos con Fedemedios para conocer cómo vive la población en ese municipio afectado por la violencia y encontramos que los menores de edad están siendo especialmente afectados. Esta es la historia que publicamos ayer: “Huir, ser reclutado o morir: el peso de ser menor de edad en Argelia, Cauca”, con ilustraciones de Giuliane Cerón.
Jeanneth Valdivieso Mancero, editora y coordinadora periodística.
¡Bienvenid@ a los Privaditos Virtuales! 🎉
Si se lo preguntan, la respuesta es sí: esta es una idea que surgió un día en que tres periodistas se tomaban algo. “¿Y si nos inventamos unos talleres?”, dijo unx. “Qué pereza otro taller de periodismo más en el que siempre dicen lo mismo”, comentó otrx. “Hagamos talleres de no periodismo para no periodistas sobre temas no periodísticos, como un chiste”, y ahí, ¡bum! Dijeron: “Hágale”.
Nos juntamos con 070 y FES Comunicación para armar BAILA, CORRE, AMA, COME, unos encuentros (bien) informales para imaginarnos, juntxs, nuevas formas de crear contenidos. En un mundo donde la dictadura del pensamiento domina, llega la narrativa del hedonismo. Desde el lunes 21 de octubre, nos reuniremos cuatro veces para hablar de lo que más nos apasiona: música, comida, correr y amar. 🕺🏽👟🫀👄
🗓️ Fechas: Lunes: 21 de octubre, 28 de octubre, 4 de noviembre y 11 de noviembre
📍 Lugar: Zoom
💸 Costo: ¡Entrada libre! No cobramos cover.
Aunque no es obligatorio registrarse, si nos dejas tu correo en este formulario, te enviaremos un recordatorio con el enlace para conectarte el día de cada sesión: https://forms.gle/cNywbCx6mkFWyPZeA 🔗
Disclaimer:
Respetamos tu privacidad. La información que nos proporciones solo se utilizará para enviarte recordatorios de las sesiones y nada más. Cuidamos tus datos y no los compartiremos con nadie.
Alejandro Gómez Dugand, director.
Un kiwi* reflexiona sobre la COP16: Cosas que Colombia y Nueva Zelanda tienen en común
Mañana, Cali, Colombia y el mundo abrirán un nuevo capítulo de compromisos ambientales. Sin embargo, lamentablemente Nueva Zelanda (NZ) y Colombia no han cumplido con sus promesas anteriores sobre biodiversidad. Como saben, los colombianos son reconocidos internacionalmente por sus problemas de compromiso, a menudo figurando entre los tres países del mundo con mayor índice de infidelidad. Pero parece que NZ también comparte algunos de estos problemas de compromiso.
Hace dos años, en Montreal, Canadá, naciones de todos los rincones del planeta firmaron un acuerdo histórico, comprometiéndose a establecer objetivos para proteger el 30 % de la tierra y el mar para la naturaleza, junto con miles de millones de dólares en reformas e inversiones ambientales. Sin embargo, nuevos informes han demostrado que el 80 % de estas naciones no han presentado sus planes con la fecha límite para hacerlo: el domingo 20 de octubre de 2024.
Esto incluye tanto a Colombia como a NZ.
Colombia es conocida como un país megadiverso, y alberga la mayor variedad de especies de aves en el mundo. A medida que el mundo se enfrenta a una crisis ambiental creciente, tiene sentido que el país amazónico megadiverso haya sido elegido para albergar la COP-16.
Al igual que los colombianos, los kiwis aman a las aves. Y casi todos nuestros favoritas mantienen su nombre indígena māori. Puedes ver algunos aquí.
Hablando de comunidades indígenas, tanto Colombia como NZ son hogar de ellas, lo que nos da una razón adicional para proteger nuestros ecosistemas, ya que su identidad, cultura y forma de vida están entrelazadas con la naturaleza.
Siendo una isla tan aislada, NZ también alberga un inmenso número de especies endémicas (especies que solo se encuentran en un país). Los expertos sugieren que hay aproximadamente 80 000, casi la mitad de todos los seres vivos en NZ.
Aparte de los humanos, la rica biodiversidad de Colombia y NZ y sus hermosas aves pintan un cuadro positivo. Sin embargo, nuevos informes continúan mostrando que ambos países están fracasando en la protección de su medio ambiente nativo, incluidas sus promesas de proteger tierras indígenas.
La semana pasada, un nuevo informe del International Crisis Groups mostró que, a pesar de los objetivos del gobierno para reducir la deforestación, esta sigue aumentando en Colombia. Además, el Estado Mayor Central (EMC), una de las disidencias de las extintas FARC, “ha demostrado que tiene el poder de frenar o acelerar la deforestación cuando así lo decide”.
Aunque no se define legalmente como un grupo criminal, el nuevo gobierno de derecha de NZ también ha mostrado un gran desprecio por los ecosistemas del país con una ola de nuevas políticas destinadas a acelerar el crecimiento económico.
Así que, mientras comenzamos diez días de enfoque global en la biodiversidad, espero que tanto NZ como Colombia recuerden que el compromiso no es algo puntual; debemos seguir adelante con nuestros planes para proteger las hermosas aves y especies que nos dan vida y nos traen alegría.
Timothy O’Farrell, redacción.